06 Jul SEGURIDAD
La incapacidad de adaptación a nuevos enfoques por parte de la conducción política, genera una cultura que valora la continuidad por sobre la innovación, lo cual impacta directamente en la seguridad por no realizar un abordaje desde una mirada sistémica.
Los desafíos y oportunidades que se presentan en la sociedad actual, están impulsando a los gobiernos municipales a tener que adaptarse, adquiriendo así, nuevas funciones y responsabilidades.
Este proceso de transformación, tristemente, está siendo llevado adelante por una clase política municipal que prevalece de forma ininterrumpida en el poder hace ya varias décadas. Como resultado, se genera una marcada tendencia a aferrarse a ciertas formas de hacer las cosas, incluso aunque ya no sean efectivas o eficientes. Esta resistencia al cambio tiene varios matices, pero el principal puede aludirse a la incapacidad de un sector de la dirigencia en adaptarse a las nuevas tecnologías y enfoques, persistiendo así, en modelos conocidos y cómodos por sobre la innovación.
Cinco ideas para implementar o potenciar a nivel municipal
1. El Centro de Monitoreo de Seguridad, debe articular con instancias provinciales y nacionales de Seguridad, como así también con los centros de empresas de seguridad privada, en miras de converger esfuerzos para la prevención y detección de delitos, ya que permiten la supervisión constante de áreas de alto riesgo.
2. Por otro lado y de manera complementaria, crear un centro de fusión de información, donde se recopila, integra y analiza información de diversas fuentes para crear una imagen completa de la situación de seguridad en una zona determinada. La información recopilada puede incluir datos de cámaras de seguridad, registros de llamadas de emergencia, informes de la policía, fiscalías, juzgados, redes sociales, etc. Con estos datos se crean mapas del delito, los cuales son una representación de los patrones y la incidencia delictiva de una ciudad, un barrio o una zona específica; por ejemplo, tipo de delito, la frecuencia y la ubicación del mismo, tendencias a lo largo del tiempo, etc. El objetivo principal de un mapa del delito es identificar las áreas de mayor riesgo y enfocar los recursos y esfuerzos en las zonas más críticas.
3. Promover la cultura de la denuncia es fundamental para que las autoridades puedan actuar contra el delito. Creando programas de concientización para promover la cultura de la denuncia ciudadana, garantizando la confidencialidad y protección de la identidad de las personas que realizan la denuncia, evitado así lo que temen muchos vecinos, posibles represalias a los denunciantes. Para cumplir con esta medida, se implementarán además de las líneas telefónicas gratuitas vigentes, aplicaciones móviles, páginas web y redes sociales para informar delitos.
4. Evitar entornos descuidados y deteriorados, procurando el constante mantenimiento de espacios públicos limpios, iluminados y ordenados. Los planes de mantenimientos preventivos y correctivos del espacio público son determinantes para disuadir a delincuentes de cometer delitos.
5. El Juzgado de Faltas Municipal es un órgano que debe cumplir un papel central en el mantenimiento de ciudades limpias, iluminadas y ordenadas, ya que se encarga de resolver y sancionar las faltas o infracciones cometidas por los ciudadanos dentro del ámbito municipal. Es una herramienta efectiva al momento de generar orden territorial por medio de su influencia en la convivencia comunitaria.